- Apenas terminaba López Obrador de informar sobre la decisión de invitar al gobernador sinaloense, a sumarse al proyecto de la 4T, cuando varios de sus funcionarios se les redibujó la sonrisa, como si se reiniciaran en otro periodo más de chamba, sin embargo fue cuestión de horas, para regresarlos a la realidad: el “hueso” es para una sola persona y a 9 mil 303 kilómetros de Culiacán…
#Breves / Editorial Mercurio
Poco les duró el festejo. La noche del viernes, horas después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador hizo pública su invitación al Gobernador Quirino Ordaz Coppel para que se sumara al Gobierno de la 4T, seguro que hubo funcionarios que destaparon su mejor botella de vino, calmaron sus más profundos temores y durmieron parados. Sintieron tener un salvoconducto, un manto protector, un pacto de impunidad.
Pero el sábado, AMLO despejó rápido la incógnita: Quirino Ordaz va… a la Embajada de España. Asi que quienes empacaron maletas para irse con su jefe al nuevo cargo federal, vale más que las vayan desempacando, y saquen sus ilusiones de sentirse a salvo de la justicia por irregularidades cometidas en este sexenio agonizante.
A la Embajada se va Quirino y solamente él. Quirino al gozo… otros al pozo. Un examen de conciencia no le caería mal a uno que otro funcionario que, al amparo del poder, se volvieron “loquitos” y hasta el pasito han cambiado, con pecados y excesos que, tras el 1 de noviembre quedarán expuestos sin Gobernador, sin PRI, sin Quirino, y con un nuevo gobierno en Sinaloa con todos los hilos del Poder, con un gobernador como Rubén Rocha con gran base social.
Ya hay una lista de cinco funcionarios bajo la lupa, en áreas donde se concentró el mayor gasto con la mayor opacidad. La pregunta es hacia dónde van a parar las rutas del dinero.
Ya la Diputada Federal, Merary Villegas dejó en claro que esta invitación no es la firma de un pacto de impunidad con el Gobernador saliente, por lo que al terminar de ocupar dicho puesto, deberá someterse al escrutinio de la ciudadanía.
“Esta invitación que hace el Presidente al Gobernador no quiere decir de ninguna manera que tengamos que firmar un pacto de impunidad...así como las y los legisladores tenemos que rendirle cuentas al pueblo de Sinaloa, él como Gobernador, que deja una administración, deja cuentas que revisar, y tendrá que rendir cuentas a la sociedad”, expresó a medios de la capital del estado la aguerrida legisladora.