top of page

¿Qué hay en el Évora?

  • Rafael Montoya
  • 24 nov 2021
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 24 nov 2021

¿Con cabeza o sin cabeza?

Seguro te has de estar preguntado, ¿cómo que con o sin, será algo de ejecuciones o qué? Pero no, ¡no te asustes! Déjame platicarte, así rápidamente.


Estarás leyendo sobre el famoso “oro blanco del mar” sí, exactamente lo que pensaste, nada más y nada menos que del CAMARÓN, éste crustáceo tan codiciado por muchos y odiado por algunos, ya que puede ser que con tan solo olerlos les provoca alergia, ya no digamos comerlos.


Actualmente como estamos en tiempo de pesca de esta delicia, tanto en bahía como en alta mar, por todos lados podemos encontrar vendimia de este marisco, ya sea con anuncios afuera de casas particulares o en puntos de venta bien establecidos, sin dejar de lado los carros que te lo llevan “hasta la puerta de su casa” (eso último se lee cantado ¿verdad?).


Pero, aquí entra una duda ¿a quién comprarle para no ser timados?, pues sabemos que –como en todo- puede haber trampas disfrazadas de “calidad y precio”, pero ahí te va, ¡a ojo de buen cubero! no fácilmente se lo burlan.


Mas hablemos de su precio, observando y preguntando aquí y allá encontrarás que, en su mayoría el camarón sin cabeza lo están ofertando a $150 pesos por kilo, de repente puede que lo alguien lo tenga un poco más barato, o unos $10 pesos más caro, tal vez.


Con cabeza oscila en los $130 pesos por kilo, tal vez puede parecer más cómodo adquirirlo sin cabeza, ya que en muchas de sus preparaciones ésta se desecha junto con las cáscaras, empero ese detalle es bueno, pues eso nos indica que está nuevecito y de calidad, ¡y me consta! A más de que a la vista tiene más llamativo su color grisáceo y su carne bien conservada.



Claro que hay otros precios de acuerdo a los tamaños del camarón, esto lo saben mejor los que se dedican a exportar grandes cantidades de tan deseado crustáceo, porque ahí su venta es por tallas, que expresan el número de camarones contados ya sea por libra o por kilo. Para que lo puedas entender mejor; si te ofrecen camarón talla 50/60 que quiere decir, de 50 a 60 camarones hacen un kilo y viene siendo el de medida chica.


Pero como no sabemos de tallas, siempre llegamos a algún punto de venta expresando con nombres en vez de números, por ejemplo: grande, mediano y chico. Esto, porque descocemos de tallas, al menos yo sí desconocía de estos números y hace poco supe que hay camarón extra jumbo y en tallas se expresa U/15, la “U” es para designar las tallas más grandes, que significa “under” (bajo) y entre más bajo sea el número, más grande es el camarón.

Pero como te expresaba al comienzo de la columna, “a ojo de buen cubero, no fácilmente se lo burlan”, y no es que yo me dedique a estar comprando y comprando, ¡no! Sino que me ha tocado comprar varios kilos a la vez y me ha servido para ubicar 3 cosas: calidad, precio y medida, que son importantes tenerlas en cuenta, para que no te vayas con el engaño de los precios bajos.


Te voy a platicar unas experiencias personales de las que me he salvado, que espero te sirvan para futuras compras de este crustáceo. Una aplicada en los precios, porque ‘luego, luego’ nos dejamos ir por ver precios bajo, viendo por allá en la esquina un cartelón verde que dice: “camarón a $90”, y pensamos, ¡ha de estar bueno, voy a llegar! Y nada que el camarón era con cabeza y estaba más pa´llá que pa´ca, que fue lo que me pasó a mí. Por eso te aconsejo que no te confíes de los precios bajos, porque te pueden hacer chuza.


Otra y esta sí que estaban, pero bien declarados, vendían camarón afuera de un supermercado, tenían una cartulina que decía “camarón a 120 y 2 por 200”. Y que me acerco para preguntar, entonces sacan una bolsa para enseñarme y ¡nombre! En cuanto lo vi, dije entre mí: “tiene más agua y hielo que camarón”, y a mi ver, a lo mucho era medio kilo de camarones.


¿Qué te quiero dar a entender? Pues, que tengas cuidado de dónde o a quién comprarle camarón, ya que es una temporada donde hay mucho, pero no siempre es de calidad o precio justo.


En mi opinión te recomiendo que ubiques los puntos de venta fijos, porque son los que más inspiran confianza y donde encontraras camarón fresco y con precio razonable. ¡Saludos y que tengas mucho éxito!


El autor, José Rafael Montoya, es un joven inquieto egresado de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación, ha tenido actividad como colaborador de Periódico Mercurio y hoy trata de aportar ideas frescas a nuestro oficio. ¡Aquí pues su trabajo!

Comments


bottom of page